Para Alexander Valchyshen, investigador del Global Institute for Sustainable Prosperity, Mearsheimer se equivoca.
A continuación, presento la segunda parte de la entrevista que le realicé. ¿Cuál es tu perspectiva sobre lo que señala Mearsheimer?
“Vale la pena mencionar que desde finales del período de la Unión Soviética (US), los economistas establecidos en Moscú impulsaban una agenda de libre mercado en el discurso público. Específicamente, el economista pionero y promotor de la terapia de choque fue Yegor Gaidar.
A nivel internacional y especialmente después de la caída del Muro de Berlín, hubo un proceso de educación de futuros pensadores políticos y económicos liberales para el siglo XXI. Rusia fue un actor activo en ese proceso. En este sentido, durante esta etapa Gaidar aprendió el enfoque económico occidental junto con otros economistas brillantes. Tal proceso de aprendizaje tuvo el apoyo del empresario británico Antony Fisher. Empresario que construyó toda una red de organizaciones que agrupaba a expertos neoliberales.
A principios de los 90s, Gaidar y sus colegas asumieron puestos clave en el gobierno ruso. Las decisiones que tomó este grupo de economistas estuvieron enfocadas en avanzar en la agenda neoliberal.
Entre las decisiones que tomaron estuvieron la liberalización del sistema de precios, iniciaron la privatización de grandes empresas públicas, e impulsaron el financiamiento no inflacionario del gobierno.
Los gobiernos de otros estados recientemente independientes de la antigua US siguieron el proceso neoliberal que realizó Rusia.
Tal fue el caso de Ucrania la cual copió las mismas reformas económicas, viendo a Rusia como el hermano mayor a seguir.
En el año 2000, ocurrió la transferencia de poder de Yeltsin a Putin. En 2005, Putin declaró que la desaparición de la Unión Soviética fue la mayor catástrofe geopolítica del siglo. Sin embargo, Putin nunca revirtió las reformas económicas neoliberales implementadas por los economistas rusos apoyados y formados por Antony Fisher.
Por el contrario, bajo su gobierno en curso la institución de la propiedad privada tanto en los medios de producción como en el sistema monetario se consolidó. Recientemente, el gobierno ruso instrumentó medidas inspiradas en el Fondo Monetario Internacional. Por ejemplo, privatizó parcialmente el sistema de pensiones y aumentó la edad de jubilación.
En 2012, Putin inició la creación de la Unión Euroasiática. El objetivo de esta Unión es consolidarse como una mejor plataforma económica que la Unión Europea. En el aspecto monetario, la idea es que los miembros de la Unión adoptaran el rublo como unidad de cuenta y por lo tanto abandonaran su propio dinero.
El Euromaidán 2013-14 de Ucrania fue en mi opinión, una rebelión contra este proceso neoliberal encabezado por Rusia. En 2013-14, Rusia dio la bienvenida al Euromaidán ya que abrió el camino para anexar Crimea y crear un alboroto nacional.
Desde la anexión de Crimea, la escasez de rublos para satisfacer las necesidades de la población ha ido en aumento. Es decir, el proyecto neoliberal se ha potenciado en esa región bajo el actual gobierno ruso”.