En el nombre llevan la penitencia: los partidos políticos están destinados a ser entidades fragmentadas debido a las pugnas internas de militantes que buscan, casi siempre, las mejores posiciones en el gobierno.
En Nuevo León, las divisiones internas los ponen en riesgo de perder el capital político que reflejan en las encuestas, donde por lo menos tres de las principales marcas se encontraban hasta hace unas semanas en un empate técnico: el PRI, Morena y el PAN.
En el PRI: no acaban de acomodarse las fichas de los grupos que se sienten de nuevo excluidos por el sector dominante del partido, por lo que algunos de ellos ya migraron hacia otras latitudes donde la piel es más morena.
Tuvo que venir ayer de nuevo, tras intentar sin éxito una alianza con el PAN la semana pasada, el dirigente nacional del tricolor, Alejandro Moreno Cárdenas, a sentar a los cuatro principales aspirantes a la candidatura a gobernador para comprometerse a que el proceso de selección se llevará a cabo mediante convención de delegados.
Los alcaldes Adrián de la Garza, César Garza y Cristina Díaz, además del ex secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, harán precampaña de aquí al 8 de enero, cuando tendrá lugar la convención, la cual no garantiza que los tres perdedores queden contentos.
En el PAN: siguen sin ponerse de acuerdo, ni adentro entre los grupos, ni afuera con los posibles precandidatos a la gubernatura, entre quienes figura Luis Donaldo Colosio.
En la alianza: integrada por Morena, Partido del Trabajo, Verde y Nueva Alianza, no tardan en comenzar las peleas por las candidaturas a las alcaldías, proceso en el que debería llevar mano quien resulte el abanderado a la gubernatura, pero ya los morenistas originales comienzan a renegar de los recién llegados.
En Movimiento Ciudadano: la armonía se perdió cuando se dijo que Samuel García y Luis Donaldo Colosio competirían por la candidatura a gobernador, en un proceso que algunos vieron como un traje a la medida para el hoy senador con licencia.
Hoy Colosio se halla replegado, molesto y lastimado, mientras MC podría fragmentarse aún más ante su eventual salida, lo que evidencia que hoy los partidos están… más partidos que nunca.