El arte creando problemas, es su fatalidad: el Estado trata de aportar soluciones, implementar acciones que demuestren que el régimen está con la cultura, y nadie sonríe. La convocatoria de la Secretaría de Cultura que ofrece apoyo económico para montar obras de teatro o danza en los obsoletos teatros del IMSS, tiene varios puntos y exigencias para acceder a los 300 mil pesos que otorgan para cada espectáculo. El show será cómo montar algo digno con esta cantidad en un teatro sin servicios técnicos.
La lista de requisitos es larga, sin embargo, lo más llamativo es el inciso 7.3 dice que se tomará en consideración las obras que promuevan “inclusión, diversidad y equidad”; y por otro lado 7.4 dice: “No se considerarán proyectos que promuevan la violencia, discursos de odio (racistas, machistas, misóginos, clasistas, etc.) o contenidos discriminatorios”. Entre la ideología y la corrección política, el jurado dictaminará qué es lo mejor para las familias mexicanas.
Nos informan nuestros insiders que la solicitud de un tal William Shakespeare fue rechazada porque presentó “Ricardo III” con diálogos misóginos, y que promueve la violencia intra familiar, Ricardo mata a su hermano y encierra en una torre a los sobrinos, para matarlos. Fatal. También le rechazaron “Sueño de una noche de Verano” por promover el uso de sustancias psicotrópicas y hablar de sus fascinantes efectos con una gran orgía. Rechazaron la solicitud de Racine por su obra “Fedra”, sobre una adúltera, que seduce a su hijastro y mata a sus propios hijos, es más lo descalificaron de futuras convocatorias por estigmatizar a la mujer con discursos de odio.
Esquilo, muy puntual, llevó su propuesta titulada “Agamenón”, fue rechazada por promover el feminicidio, Agamenón sacrifica a su hija Ifigenia. Estigmatiza a la mujer, Clitemnestra su esposa, lo asesina a él y manipula a sus hijos. Le advierten a Esquilo que de seguir escribiendo así lo denunciarán ante la Comisión de Derechos Humanos. Sófocles se animó y llevó una obrita llamada Edipo Rey, los miembros de jurado solicitaron un psiquiatra del IMSS y lo llevaron a un pabellón aislado porque su discurso de odio se consideró patológico.
August Strindberg presentó su proyecto con una tesis sobre Teatro Naturalista, el drama se titula “Señorita Julia”, y según el jurado incide en las diferencias de clases, muestra al pueblo como pérfido y malvado, y es misógino por definir a las mujeres como seres manipulables, el sirviente seduce y luego rechaza a la burguesa Julia y ella se suicida. En ese momento los psiquiatras del IMSS elaboraron un expediente para Strindberg.
Los psiquiatras y miembros del jurado decidieron escribir ellos mismos las obras participantes, con un grupo de psicólogos, activistas sociales, influencers y pedagogos, para no volver a tratar con degenerados teatreros y hacer teatro políticamente correcto. Advierten que no es censura.