Las fianzas son una garantía cuyo objetivo es garantizar que, en caso de incumplimiento del fiado, ya sea un proveedor o un cliente, se repare el daño ocasionado, o la falta de calidad del producto o servicio a entregar.
Cuando se habla del contrato de fianza, viene a la mente las palabras confianza, seguridad, cumplimiento, satisfacción entre otras, pues en teoría dan esa parte de tranquilidad que el incumplimiento de un servicio o el surtido de un producto puede acarrear riesgos que pueden ser responsabilidad del proveedor o de casos fortuitos o fuerza mayor.
En la celebración de un contrato, el proveedor debe tener la capacidad financiera, operativa y logística necesaria para ejecutar un contrato, pero eventualmente algunos proveedores en la sed de ganar contratos, pueden tomar compromisos que difícilmente podrían llegar a cumplir solos.
Sin embargo, para el contratante o cliente, que invierte tiempo y recursos económicos al desarrollar un proceso de contratación en el que considera varios oferentes, la seriedad de la oferta deberá ser garantizada.
La cobertura de seriedad de oferta en un seguro de fianzas garantiza el alta de un proveedor al proyecto a celebrar, entre el contratante y el contratista, bajo los términos estipulados en la oferta.
La fianza, es por lo tanto un complemento del contrato y puede abarcar pedidos, órdenes de compra, servicios entre otro tipo de documentos. Comprendiendo que sin importar el tipo de contrato cuyo cumplimiento se busque garantizar, la fianza tiene como función principal responder en caso de incumplimiento de alguna clausula del contrato.
En México hay, diferentes tipos de fianza, entre las que destacan las:
De fidelidad, administrativas (con casi un 80% del total de las fianzas emitidas),
Fiscales (contratada por instancias como Pemex, CFE o SHCP),
Judiciales y de
Arrendamiento
Para el caso de contratistas las fianzas, se dividen en dos:
Para personas físicas y
Personas morales,
En ambos casos, la función es que se contratan en una licitación pública, o que concursan en presupuesto de una obra privada.
En las licitaciones los contratistas y proveedores del servicio deberán garantizar; el contrato en la oferta, de la realización de una construcción, mejora o mantenimiento de alguna tarea en específico estos trabajos pueden representar la una parte o la totalidad de la obra, bien partes de la obra dividida de acuerdo con su especialidad y forma de trabajos.
Si eres proveedor y tu cliente te pide un contrato de fianza para garantizar el trabajo, debes de saber que las fianzas es un respaldo al contrato que garantiza y protege el cumplimiento de obligaciones y por lo tanto, la emisión de la póliza puede tardar algo de tiempo ya que invariablemente deberás presentar la documentación requerida por la aseguradora para calificar a este tipo de seguro de fianza.
El proceso de autorización y por lo tanto posterior protección es parecido a solicitar un crédito.
Deberás contar con un fiador y en algunos casos, dependiendo los montos, deberás contar con garantías reales, tales como propiedades (casas, edificios, terrenos, maquinaria, etc) que deberá además estar libre de gravamen o hipoteca.
Ten al día toda la documentación legal y financiera correspondiente como por ejemplo:
Estados Financieros auditados presentados al SAT.
Curriculum y/o brochure del cliente o compañía.
En caso de ser empresa, las escrituras, puestos y documentación al corriente ante el SAT como la opinión de cumplimiento, Constancia de Situación Fiscal Acualizada, etc.
Pago de impuestos prediales de la propiedad en garantía y las propiedades de la empresa.
Referencias bancarias.