En el zócalo de la capital, la Sedena destruyó un total de 467 armas de diversas características - 2 mil 124 cartuchos, 174 cargadores y 114 cascos - como parte del programa “Destrucción de Armamento Decomisado”.
Al respecto, el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, reconoció su preocupación por la inseguridad y agregó que se requiere de acciones policiales de fuerzas del orden y de la mano de la sociedad para vencer al narcotráfico, narcomenudeo y todas las formas de violencia. También, mencionó que su gobierno ha desmantelado varias bandas criminales en Puebla y que ya tiene un atlas delincuencial.
Tras aplaudir el programa de destrucción de armamento, Barbosa Huerta abundó que no será dinero lo que se dará al intercambiar armas, sino que serán aparatos electrónicos y electrodomésticos, para los que se invertirán 20 millones de pesos.
Por su parte, el General de Brigada de la 25 zona militar, José Alfredo Rodríguez, detalló que la prioridad del gobierno de la República Mexicana, encabezado por Andrés Manuel López Obrador, es que los mexicanos se desarrollen en un ambiente de paz y seguridad.
“El canje de armas es una prueba del esfuerzo de promover la entrega voluntaria de armas de fuego y disminuir actos violentos en el entorno social”, dijo al recordar que las personas que participan en el canje se les respeta su anonimato y no hay reprensiones en su contra.
Cabe destacar que, a nivel nacional en lo que va de 2019, la Sedena ha destruido 200 mil armas decomisadas.
MPL