Qué bueno que el América perdió contra el Real Madrid, de lo contrario no íbamos a soportar a los americanistas en 100 años.
La mayoría de los seguidores del equipo de futbol América, son burlescos, pesados y detestables.
A veces son insoportables.
Los americanistas son sangrones y groseros, se ríen de la desgracia de los otros equipos y presumen los triunfos como si ellos hubieran metido los goles. Su alegría o tristeza depende del equipo.
Los seguidores de este club de futbol son muy parecidos en su personalidad. Son los más odiosos de la oficina o del salón de clases, y no tienen respeto por los demás. Cuando ganan, llegan con la camiseta amarilla puesta y cantando "Llevo en mi pecho los colores del América". Y cuando pierden, llegan escondiéndose a la oficina y no quieren hablar con nadie.
No tienen humildad. Los seguidores del América creen que son los mejores, aunque no lo sean, y nunca reconocen los méritos de los otros equipos. Ellos maximizan sus triunfos y minimizan sus derrotas. Cuando el árbitro les ayuda, se engañan solos para decir que no era fuera de lugar. Y cuando el árbitro no los ayuda, dicen que los afectó y que debió pitar un penal. Son nefastos.
No saben perder. Cuando sufren una derrota, siempre tienen argumentos para justificarla. Y cuando el equipo anda mal, los mismos aficionados abuchean a los jugadores y quieren lincharlos.
Aunque tampoco hay que generalizar. Hay seguidores del América que son honorables y respetuosos y que portan los colores con dignidad, pero son los menos. La mayoría de los americanistas son convenencieros y hasta ventajosos.
La pregunta es: ¿Por qué el América aglutina a este tipo de personas en México? ¿Por qué el más pesado de la oficina le va al América? Habría que preguntarle a los psicólogos. Pero desde luego que el club América atrae a cierto tipo de personas. Son seguidores que quieren ganar fácil, que quieren irse a la segura, que no quieren sufrir con las derrotas, que buscan triunfos gratis aunque no sean de ellos y que atan su alegría a un equipo cuyos éxitos son exaltados por la televisora.
Lo más complejo es descifrar si el América atrae a los aficionados nefastos o si el ambiente los hace así. En realidad también son los más agredidos. Todos los cuestionan y festejan sus derrotas, y tal vez eso provoca que se defiendan y sean irrespetuosos.
El equipo tiene historia y es protagonista, eso nadie lo va a cuestionar, pero por lo mismo deberían ser diferentes y ejemplares –con los mejores valores del deporte-, empezando por los comentaristas de la televisión que ocultan sus faltas y exageran sus glorias, tratando de engañar al pueblo.
Por todo eso. Por todo lo que sabemos. Por todo lo que representan en la sociedad: qué bueno que no le ganaron al Real Madrid.