“El nuevo gobierno tiene que tender puentes, y si quiere tener un gran aliado productivo, noble y esforzado, que nos otorgue autonomía y le vamos a redituar con creces…durante 80 años Saltillo y Durango han sido universos cerrados”, así respondió Federico Sáenz Negrete a la periodista Sanjuana Martínez en una claridosa entrevista que se publicó en La Jornada este domingo 25 de noviembre.
Un lagunero auténtico, conocedor de las adversidades con las que ha tenido que batallar esta comarca, Federico es muy franco y agudo cuando denuncia que “La Comarca Lagunera ha aportado 75 por ciento de los recursos fiscales al Estado y se nos regresa únicamente el 12 %, mientras lo correcto hubiera sido 35 por ciento. Los catalanes se quieren separar de España porque nada más les regresan el 85% y aquí nos devuelven el 12%”.
Explica que La Laguna ha sido víctima de un fraude histórico: “Saltillo y Durango no aportan, mientras Torreón y Gómez Palacio aportan y no reciben. A 50 años se demuestra la estafa con números. Saltillo se ha industrializado con el dinero de La Laguna”.
Para compensar estos desequilibrios Sáenz Negrete propone que el nuevo “gobierno federal cabildee con Durango y Coahuila para protegerla y otorgarle (a La Laguna) el financiamiento que le corresponde, es decir, entre 30 y 35 por ciento del presupuesto de Coahuila y Durango y que se nos asigne una especie de delegado federal como el que habrá en cada estado, para que administre La Laguna y tenga plena autonomía”.
Reitera la demanda de construcción de un aeropuerto de carga con capital eminentemente privado. Actualmente 40% de la carga que llega al aeropuerto de Saltillo es de La laguna y explica como ejemplo que el melón lagunero se vende aquí hasta en un peso la unidad mientras que en Japón se cotiza a 120 dólares y el problema es que la pista del actual aeropuerto es de 2.8 kilómetros y para uno de carga se necesitan 4 kilómetros de longitud.
La Laguna merece ser reivindicada, no hay justificación válida del trato que le han dado los gobiernos estatales.