De diciembre pasado cuando asumió la presidencia a la fecha, el panorama para Claudia Sheinbaum solo se ha complicado.
Dado que –oficialmente– llegó al poder con una votación superior a la de Andrés Manuel López Obrador y con un apoyo mayoritario de los sectores sociales y productivos del país, muchos auguraron una gestión fuerte, con un Palacio Nacional todopoderoso y con cero nubarrones al tener una abrumadora mayoría en el Congreso de la Unión y una reforma aprobada para apoderarse del Poder Judicial federal, pero mucho del músculo era prestado o simulado.
En menos de cuatro meses ha quedado a la vista que la 4T no es monolítica y que su conducción y sus lealtades no están en manos de la presidenta.
En la descomposición de su tablero político se han abierto al menos nueve frentes muy importantes que –se evidencia cada mañana– afectan sobremanera en el ánimo de Sheinbaum.
El primer frente y más evidente ahora es la complicada relación con Donald Trump de quien no esperaban que acusara al actual gobierno de México de estar coludido con el narcotráfico, sí, a los de ahorita. Sabían desde antes de las exigencias de frenar la migración ilegal en la frontera norte, de equilibrar la balanza comercial con Estados Unidos y alejarnos comercialmente de China así como de aumentar el combate al tráfico de fentanilo y las organizaciones criminales internacionales, pero hasta allí.
La presión es tal que en menos de cuatro meses el gobierno mexicano ya entregó a Estados Unidos más que todo lo que había cedido López en todo su sexenio en materia de combate a los cárteles.
Más que relaciones diplomáticas lo que se ve parecería una relación tipo chantaje en el que una de las partes tiene el poder, información, intereses claros y utiliza totalmente su fuerza para conseguir lo que quiere, mientras que la otra solo accede sin siquiera quejarse, aceptando todo lo que le exigen.
Una de las demandas extranjeras abrió y exacerbó un segundo y violento frente para el gobierno mexicano al verse obligado a perseguir a líderes y células de los cárteles a los que les dejó operar a sus anchas durante seis años en todo el territorio nacional. Más de este tema en una semana. _