Estados Unidos acusó hoy a China de aprovecharse de ser un miembro de la Organización Mundial del Comercio (OMC) para no desmantelar sus políticas "incompatibles con el sistema de comercio internacional" y, en cambio, convertirse en uno de sus principales actores.
Ello al mismo tiempo que "mantiene su enfoque mercantilista del comercio y de las inversiones dirigidas por el Estado en detrimento de EU y otros miembros de la OMC, de sus industrias y trabajadores", dijo Dennis Shea, embajador estadunidense ante esta entidad.
En la jornada dedicada por la OMC a revisar las políticas comerciales de China, Shea sostuvo que la situación "es de hecho peor que hace cinco años", en referencia a la última vez que China se sometió a este ejercicio obligatorio para todos los países que forman parte de la institución.
El representante de la administración del presidente Donald Trump, acusó al país asiático de generar condiciones desventajosas para las importaciones de bienes y servicios, ofrecer un tratamiento preferencial a las empresas estatales y proteger de forma inadecuada los derechos de propiedad intelectual.
OMC, sin herramientas para resolver conflicto
El embajador Shea dijo que un "ajuste de cuentas" de las políticas comerciales chinas injustas es urgente y demasiado grande para ser manejado por la Organización Mundial del Comercio (OMC).
"Dado el rol muy amplio y creciente de China en el comercio internacional, y el grave daño que causa a los socios comerciales de China su enfoque mercantilista en comercio e inversión, este ajuste de cuentas ya no puede posponerse más", señaló el embajador ante la organización con sede en Ginebra.
"Está claro, además, que la OMC actualmente no ofrece todas las herramientas necesarias para remediar esta situación", agregó
Washington escaló en su disputa comercial con Pekín al amenazar con aplicar aranceles de 10 por ciento a bienes chinos por valor de 200 mil millones de dólares. En respuesta, China acusó a Estados Unidos de hostigamiento y dijo que se quejaría ante la OMC.
GGA