Hace unos días la NBA tomó la decisión de proporcionarles anillos, que detectan el coronavirus, a los jugadores para que los usen de manera voluntaria en los encuentros. Estos accesorios llamados Oura son capaces de predecir síntomas de dicho virus hasta tres días antes con un 90% de precisión.
De acuerdo con los basquetbolistas, el anillo es muy cómodo al momento de usarlo y tirar canastas con él, razón por la que la NBA no ha recibido ninguna queja; aunque, sólo un jugador de la máxima casa de basquetbol no podrá utilizarlo, pues no tiene el dedo anular.
Gerald Green de los Rockets de Houston perdió su extremidad cuando tenía 11 años, ya que tuvo un accidente mientras estaba jugando con su hermano. Es por eso que tendrá que preguntarse si lo ideal es viajar a Orlando en estos momentos de alto contagio.
“Estaba bromeando con mi hermano y él me decía: 'No puedes saltar tan alto'. Lo hice, pero me lastimé el dedo y no me lo pudieron reconstruir durante la operación. Si lo tuviera, probablemente podría hacer más mates de los que he hecho en mi carrera, pero todavía puedo seguir jugando”, comentó el jugador como anécdota.
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