Suele ser pesado y difícil mentalmente para los jóvenes que se mudan por cuestiones de estudio o trabajo esto tras salir de casa, dejar atrás a la familia y amistades, tanto que es motivo común de visita en las terapias psicológicas.
En entrevista, el psicólogo Sergio Carrillo explicó la soledad que en ocasiones llegan a sentir los jóvenes foráneos al estar alejado de sus seres queridos, y que llegan a tratar en las sesiones con los especialistas.
“Se pierde de alguna forma el contacto con amistades, con la familia, a pesar de qué se tiene de lado la tecnología como las videollamadas o las llamadas comunes, pero si hacen énfasis en que ya no es lo mismo, y es cierto, pues naturalmente, una videollamada no sustituye lo que puede ser un abrazo o un convivió de manera física”, explicó.
Esta soledad puede orillar a caer en malas amistades, ambientes ajenos y vicios peligrosos, todo con tal de no pensar en aquello que los entristece.
“No en todos los casos se da, pero si nos metemos en el tema de los vicios, drogas, en algunas ocasiones, estas cumplen un papel que los ayudan a sentir sensaciones diferentes, y cuando no se tienen buenas relaciones, pues estos vicios están disponibles, pero terminan haciendo algún tipo de daño”, detalló.
Además, el mudarse a los 18 o 20 años a otra ciudad, vivir solos y tomar responsabilidades de un adulto, los llega a privar de disfrutar etapas que sus compañeros si gozan, como el salir de fiesta.
“Tener que dejar ciertas experiencias que consideran que para su edad tendrían que estar viviendo por tomar otras que a lo mejor les requieren, por ejemplo la parte del trabajo, que dicen, ‘me gustaría salir con amigos de fiesta, pero no lo puedo hacer, porque el día siguiente trabajo o tengo que doblar turno para poder atender la parte de mi alimento, los servicios generales o la renta misma’ que a veces no suele ser accesible aquí en Monterrey”, agregó.
El especialista, recomendó a quienes viven una situación similar o están a punto de vivirla, acercarse a grupo o crear vínculos con personas que tengan gustos similares, platicar su sentir y así evitarán un poco el sentimiento de soledad.