Ante el temor de que se propague de manera masiva el Covid-19 en los centros penitenciarios por las condiciones en las que viven los reos, familiares de los reclusos acudieron ayer para llevarles artículos de higiene personal.
Desde temprana hora, y sin importar lo dictado el viernes por las autoridades sobre la restricción de visitas a las penitenciarías, en el reclusorio ubicado en Apodaca, decenas de personas se concentraron para ver a sus familiares y llevarles desde papel higiénico, jabón corporal, shampoo, ropa nueva, hasta tapabocas y gel antibacterial.
Notivox Monterrey acudió a este sitio, en donde se constató que las visitas se siguieron dando, aunque solo se dejó ingresar a quienes no presentaban síntomas de gripa, o personas de la tercera edad.
Las personas que lograron entrar pudieron entregar las bolsas transparentes con las pertenencias antes descritas y el dinero en sobres cerrados; a comparación de otras veces, no se permitió el acceso de comida.
En un primer filtro, personal del penal tomó la temperatura a los visitantes, quienes obligatoriamente tenían que traer cubrebocas, si no lo portaban no podía acceder al recinto.
La señora Lilia López refirió que estas medidas la tomaron por sorpresa y que fue a través de redes sociales que se enteró de que no iban a dejar pasar visitas. Pese a esto, se presentó ayer para llevarle a su hijo lo más esencial para que pueda asearse, ya que este tipo de material no se provee al interior del lugar.
"Se me hace algo muy drástico, pero es para el bien de ellos, eso creo, ya que si se enferma uno de ellos se vendrían muchos problemas, porque es demasiada gente la que está aquí desde que se trajeron a los del Topo, es mucha gente. ¿Se imagina los brotes? Si de por sí no les dan atención médica, ahora con esto, no se darían abasto", expresó tras lograr entrar al penal.
Otra de las medidas que estuvieron implementando las autoridades penitenciarias fue la restricción de acceso a toda aquella persona foránea, incluso no se les permitió entregar nada.
Por otro lado, algunas otras personas denunciaron que, ante el anuncio de la restricción de visitas, hablaron directamente al departamento de Servicio Social, y que al no tener respuesta, decidieron ir ante el temor de que no les permitieran ver a sus seres queridos.
"No nos avisaron, hablamos a Servicio Social y nada, pero vimos en las noticias que no iba a dejar pasar a nadie, pues la gente se dejó venir porque si nos ven a varios si lo íbamos a lograr y sí lo logramos. Tan siquiera pudimos dejarles algo de pertenencias y dinero", expresó el señor Gabriel Moreno.
En el puente que está a un costado del centro penitenciario se observó a hombres y mujeres preocupados por no saber si estarán bien sus familiares recluidos, ya que a muchas personas no les llevan ni insumos básicos.
Asimismo, en ese pequeño espacio se pudo ver bolsas llenas de comida, cuidadas por unas mujeres, ya que algunas señoras precisaron que tenían miedo de que se transmitiera algo a través de este medio, pese a que los doctores a nivel local y nacional han aclarado que el Covid-19 no se contagia mediante objetos.
Incluso se observó a personas vender tapabocas y bolsas plásticas, aprovechando que muchas personas seguían sin atender las recomendaciones sanitarias.
Al respecto, la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), tras recibir una alerta de que a los familiares de los reos no los estaban dejando pasar, a través de su departamento de Comunicación Social, señaló que buscarán que las autoridades penitenciarias garanticen el acceso para que las familias puedan entregar artículos de aseo.
Por su parte, el gobierno del estado, específicamente personal de Comunicación de la Secretaría general de gobierno, informó que las medidas de higiene y prevención divulgadas en días pasados seguirán en pie durante la contigencia.
Prevención
El temor de un brote de Covid-19 al interior de los penales ocasionó que familiares de los reos se acercaran a dejarles insumos de higiene.
Recorrido
Desde temprana hora, personas allegadas a los presos hicieron filas a las afueras del penal de Apodaca, pese a la restricción de visitas impuesta el viernes.
Acceso
Las pocas personas que pudieron entrar, entregaron bolsas con piezas de higiene; solo se dejó entrar a quien no presentaba síntomas de gripa y a foráneos se les prohibió la entrada.
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