El vicario general de la Diócesis de Toluca, Guillermo Fernández Orozco señaló que la violencia en contra de las mujeres es una muestra de la descomposición en el tejido social, por lo que la sociedad en su conjunto debe trabajar para erradicarla.
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El religioso sostuvo que luego de la serie de marchas que se realizaron en distintas ciudades del país, para exigir mayor seguridad y la investigación de casos de violencia hacia las mujeres, será necesario darle continuidad a las demandas, así como impulsar una serie de propuestas para mejorar sus condiciones.
“Yo aquí diría que no se quede simplemente en manifestaciones, que se propongan cosas que sean asequibles, que sean reales, que se puedan realizar, en compromiso, en mutua ayuda, en respeto”.
Reconoció que estas marchas, sobre todo en la Ciudad de México, se tornó en actos violentos; sin embargo, para el caso del Valle de Toluca, se dio en un ambiente mucho más pacifico, por lo que el llamado que hace la iglesia es a reactivar la educación en valores, desde los hogares, pues es ahí donde se comienza con la formación.
“Se debe cuidar también quienes participan (en las marchas), porque a veces, una buena protesta se ve vandalizada, como en los últimos días, y eso resta, ya no sabes quién es quién”.
LC
