Derivado a la permanencia y extensión de la temporada de lluvias en la entidad, el director general de la Comisión Estatal de Agua y Alcantarillado (CEAA), Juan Carlos Chávez González, informó en entrevista para MILENIO sobre la coordinación y acciones que mantienen con los gobiernos municipales para evitar situaciones de riesgo ante posibles inundaciones o desbordamientos de ríos.
Lo anterior, reconoció el funcionario estatal, debido a la ausencia de este tipo de precipitaciones atípicas, lo cual no se presentó en años anteriores en esta medida, pues aunque se previó que el clima sería favorable para abatir la sequía en el territorio hidalguense, es una cantidad muy grande de agua pluvial la que se reporta en todas las regiones, esto obliga a mejorar la prevención ante cualquier emergencia.
“Es una temporada complicada, sobre todo porque tenía muchos años que no se presentaban lluvias con esta intensidad. El año pasado las lluvias fueron favorables, pero en este año se visualizaba una buena cantidad de agua que iba a caer en el estado, aunque no de esta manera, por ello mantenemos esa coordinación con los municipios para salvaguardar la vida de las personas ante cualquier tipo de contingencia”, manifestó.
Las acciones y mesas de coordinación, apuntó Chávez González, se desarrollan diariamente con las áreas de Protección Civil (PC) en los 84 municipios, así como los organismos operadores de agua municipales o regionales, como es el caso de la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (Caasim), para priorizar acciones de limpieza y mantenimiento de redes pluviales, así como de drenajes.
“Nos coordinamos para ver las posibles afectaciones, hablar con autoridades municipales para que puedan desarrollar acciones antes de las lluvias, destapar drenajes, porque es común encontrar mucha basura que tapan los drenes, en ese sentido, por parte de la CEAA, se les facilita el vactor que se tiene para hacer esta limpieza preventiva, y que estemos preparados ante cualquier precipitación atípica”, dijo.
Finalmente, destacó, se mantiene un monitoreo constante de los puntos más críticos, o de riesgo, para la población, como es el caso de ríos en las comunidades donde tienen estos cuerpos de agua; así como de los puntos con mayor incidencia de anegación en las zonas urbanas, sin dejar de lado los canales de agua tratada o negra, pues también tienden a reflejar desbordamientos ante una lluvia más fuerte y prolongada.
