La noche de este jueves, Alan 'N', empresario sanmiguelense y padre de la niña Alana —quien murió por una bala perdida en un fallido operativo policial— fue detenido por tercera vez consecutiva, minutos después de haber sido liberado por segunda ocasión.
Ahora, enfrenta una nueva acusación por tentativa de feminicidio contra su hermana, en el marco de una disputa por la posesión de un parque acuático familiar.
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La nueva orden de aprehensión fue cumplimentada por elementos de la Fiscalía General del Estado de Guanajuato (FGE) apenas al salir del penal, donde había sido liberado por la acusación previa de violencia familiar. Ese caso fue presentado por su esposa, madre de Alana, quien lo señaló por agresiones ocurridas en el entorno doméstico. El juez resolvió no vincularlo a proceso, permitiendo su salida.
Tensión familiar y herencia en disputa
La audiencia por el nuevo caso se llevará a cabo este viernes a las 9:15 horas en los Juzgados de Oralidad Penal de San Miguel de Allende.
En esta ocasión, el delito que se le imputa es tentativa de feminicidio, luego de que su hermana lo acusara de haber intentado asesinarla como parte de un conflicto familiar que involucra el control del parque acuático “Escondido Place”, legado por su difunto padre.
La FGE ha confirmado que se trata de una denuncia independiente a los dos procesos anteriores, lo que coloca a Alan 'N' en el centro de una tormenta legal sin precedentes recientes en la ciudad, ya que en menos de un mes ha sido señalado penalmente por tres mujeres de su círculo más cercano su esposa, su hermana y de forma indirecta, su propia hija, cuya muerte permanece como uno de los puntos más polémicos del caso.
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La muerte de Alana, punto de inflexión
El caso de Alan 'N' estalló en la opinión pública el pasado 11 de marzo, cuando su hija Alana falleció tras recibir un disparo durante un operativo de captura ejecutado por la Fiscalía.
Ese día, el empresario viajaba con su escolta, sus dos hijas y su chofer rumbo a la escuela cuando supuestamente intentó evadir a los agentes, lo que derivó en un tiroteo.
Los ahora imputados aseguran que pensaron estar siendo atacados por integrantes del crimen organizado, ya que —según su versión— los elementos de la FGE no se identificaron antes de abrir fuego. La tragedia ocurrió un día antes del cumpleaños de la menor, lo que generó indignación y presión mediática.
A partir de ese momento, el historial judicial del empresario ha ido en ascenso. El 4 de abril, una primera audiencia por tentativa de homicidio contra agentes estatales concluyó sin que se le impusiera prisión preventiva.
A la salida de esa diligencia, fue detenido nuevamente, entonces por la acusación de violencia familiar. Apenas fue liberado de ese proceso, volvió a ser aprehendido.
Una cadena de detenciones que evidencia fracturas profundas
La concatenación de detenciones, denuncias familiares y decisiones judiciales ha puesto el foco sobre el papel de las autoridades judiciales y sobre el entorno que rodea a Alan 'N'.
En menos de un mes, ha pasado de ser investigado por agredir a agentes del Estado a enfrentar acusaciones por parte de las mujeres más cercanas en su vida.
Mientras tanto, la opinión pública sigue exigiendo justicia por la muerte de Alana y transparencia en todos los procesos judiciales, cabe señalar que, la audiencia de este viernes 11 de abril podría marcar un nuevo giro en esta historia aún lejos de concluir.
