La actitud, fe y familia fueron parte fundamental para que la señora Emma Toscano Cuevas originaria de Jalisco y quién fue diagnosticada con cáncer de mama a sus 63 años, sobrellevara el proceso difícil que implica la cirugía y quimioterapias, ante la caída de cabello, pestañas, cejas y fuertes dolores.
A pesar de la ausencia de su esposo, quien tiene 8 años de fallecido a causa de una metástasis por otro tipo de cáncer, su núcleo familiar conformado por sus cuatros hijos y nueve nietos, han sido la clave para hacerle frente a esta lucha.
“Entonces pues si se va a poner uno a llorar, que le tengan a uno lástima pues no, no sale uno, entonces pues yo siempre trato, no tengo muchas amigas, pero tengo mucha gente conocida, tengo mis grupos de oración que para mí son muy importantes y pues yo me voy y creo que con la ayuda de Dios y la ayuda del doctor José Luis, Pues aquí estoy todavía, sobre todo tener el apoyo de la familia, porque sin el apoyo de la familia este se da unos bajones, que eso mismo ayuda que el cáncer se vaya desarrollando más, porque se le bajan a uno las defensas”, señaló.
Desde hace tres años que inició su patología, relató que en ese entonces tenía programada su cita de mamografía para el mes de octubre; sin embargo al detectarse una bolita en el seno acudió con su ginecólogo con anterioridad y pudo atenderse de manera oportuna, de ahí la importancia de realizarse constantes chequeos.
“Resulta que yo en septiembre me di cuenta y ya me lo vi así me vi la bolita físicamente, entonces ese mismo día me fui hacerme el examen y ya me dijo el radiólogo que pues esa bolita pues simplemente sería de cirugía, afortunadamente era en primer grado todavía no estaba muy avanzado, me hicieron los estudios y como a la semana y media ya me estaba operando”, relató.
Después de esto tuvo que hacer el trámite para realizarse las quimioterapias, haciendo énfasis en que son pesadas, pero debía de aguantar porque era necesario para una mejor evolución.
Explicó que la atención por parte del personal médico de la clínica 46 del IMSS fue muy buena, pero el hecho del desabasto de medicamentos y falta de citas para las quimioterapias, le tuvieron que alargar de 4 a 12 sesiones, por bajarle la dosis.
Desde su experiencia recomendó a todas las mujeres qué ante cualquier anomalía que vean o que detecten en su organismo y cuerpo, acudan con el especialista y se atiendan a tiempo; así como modificar su plan alimenticio a uno más saludable.
MC
