No solo el EU anti-Trump ha decidido dar su batalla en las calles y otras instancias políticas para defender desde el derecho a abortar hasta la ecología, la igualdad de salarios y la defensa de inmigrantes, musulmanes y homosexuales. También el electorado pro-Trump se dice dispuesto a movilizarse, como se vio el sábado en una treintena de ciudades según la jornada “March 4 Trump”, donde cientos de estadunidenses refrendaron la consigna de America first y por un EU con “ley y orden” y “sin indocumentados”.
Las marchas —aunque pequeñas— también buscaron contrarrestar las grandes manifestaciones anti-Trump como la Gran Marcha de las Mujeres del 21 de enero, convocada por agrupaciones femeninas pero que fue apoyada por destacadas figuras de la cultura, la política y el arte, como el cineasta antisistema Michael Moore, quien hace unos días volvió a la carga con sus exhortos en Facebook para “seguir protestando y ser visibles”, luego de una serie de proclamas desde noviembre pasado.
En sus “Diez consejos para deshacerse de Donald Trump” (22-02), Moore recomienda tomar acciones como “formar un partido de oposición con miembros jóvenes como los de Ocuppy Wall Street y Black Lives Matter” (que defiende a la población negra de la impunidad policial); “comenzar una iniciativa para reformar el sistema electoral”, y que cada uno “arme su propio equipo de respuesta rápida con cinco y hasta 20 amigos y familiares” —idea, afirma, que estuvo detrás de las protestas en los aeropuertos una hora después de que Trump firmara un decreto contra los musulmanes. Moore, dice, ya creó con amigos un “calendario de resistencia” donde se pueden saber todas las acciones que se llevan a cabo en cada ciudad.
También pide “llamar todos los días al Congreso” obligando a los legisladores a “enfrentarse a Trump y sus políticas”; “ir al Congreso una vez al mes para añadir más presión” a los legisladores y “sumarse, sumarse, sumarse” a asociaciones civiles para “luchar juntos y ser parte de algo más grande”. Importante también: “Conviértase en un medio de comunicación”: “Deje de quejarse de la prensa, deje de desear que sea algo que en realidad no es. Emprenda su propio imperio mediático compartiendo en las redes sociales la labor de los periodistas que sí trabajaban bien”.