El Vaticano presentó a finales de 2024 el primer papamóvil totalmente eléctrico de la historia, un Mercedes-Benz Clase G adaptado para el Papa Francisco, marcando un hito en la centenaria relación entre la Santa Sede y la automotriz alemana.
El vehículo, diseñado para combinar seguridad, sostenibilidad y funcionalidad, fue utilizado durante todo 2025 por el ahora fallecido pontífice.

La tradición de Mercedes-Benz como proveedor oficial de vehículos papales se remonta a 1930, cuando el Papa Pío XI recibió un Nürburg 460 Pullman Saloon.
Desde entonces, la marca ha adaptado modelos como el 300 Landaulet para Juan XXIII o el icónico G 500 para Juan Pablo II, este último considerado el primer "papamóvil" moderno.
El nuevo modelo, basado en el Mercedes Clase G 580 con tecnología EQ, es el primero en prescindir de combustibles fósiles.
"Hoy es un gran honor para nosotros en el equipo de Mercedes, entregamos un nuevo papamóvil y cumplimos casi cien años de tradición trabajando con el Vaticano", declaró el director ejecutivo de la compañía, Ola Källenius, en el acto de entrega de las llaves del vehículo al Papa.
El vehículo fue desarrollado en las plantas de Graz (Austria) y Sindelfingen (Alemania), con cientos de horas de trabajo artesanal.
"Creo que esto trae una nueva era de papamóviles", dijo Källenius, que aseguró que el vehículo es "muy silencioso".
"Hemos puesto cientos de horas de pasión y artesanía en este vehículo", añadió en declaraciones a los medios, a los que señaló que el coche "ha sido hecho a medida para el Santo Padre".

Innovación al servicio del pontífice
El papamóvil mantiene el clásico color blanco perla y la estructura abierta, pero incorpora avances tecnológicos:
- Propulsión eléctrica: Cuatro motores garantizan tracción integral y operación silenciosa, ideal para desplazamientos a baja velocidad durante audiencias.
- Asiento central giratorio: Fabricado en cuero con calefacción, permite al Papa saludar a los fieles en 360 grados. Incluye barras laterales ergonómicas para apoyo.
- Protección reforzada: Aunque el Vaticano no confirmó detalles del blindaje, versiones anteriores combinaban cristales antibalas, pisos antiexplosivos y sistemas de oxígeno de emergencia.
- Plataformas para la Guardia Suiza: Dos estribos traseros alojan a los guardias encargados de la seguridad del pontífice.
La elección de un vehículo eléctrico reforzó el mensaje ecológico que promovió Francisco, quien en 2020 anunció que el Vaticano alcanzaría emisiones cero para 2030.
El diseño también rinde homenaje a modelos históricos, como el descapotable utilizado por Juan Pablo II en los años 80, pero con un techo desmontable de policarbonato para proteger al Papa de las inclemencias climáticas.

Con información de Agencia EFE
MO