Entre los 77 trabajadores basificados, que fueron despedidos por el Congreso de la Ciudad de México a finales de diciembre por presuntas irregularidades, se encontraba Patricia Santín Olvera, quien fungía como intérprete desde hace 11 años en todas las sesiones de este órgano legislativo.
Al no percatarse de este hecho y mucho menos contar con un suplente para el cargo, los integrantes de la Comisión Permanente tuvieron que recontratar por un día a Santín Olvera, toda vez que el artículo 25 de la ley orgánica del Congreso señalan que es obligatorio un intérprete para traducir los temas del pleno a las personas con discapacidad auditiva.
“Durante el desarrollo de las sesiones del Congreso se dispondrá de los intérpretes de Lengua de Señas Mexicanas necesarios, con el fin de traducir a las personas con discapacidad auditiva los asuntos que se desahogan en el Pleno. Asimismo, en la transmisión de las sesiones que así lo requieren, se colocará un recuadro permanente en la pantalla en donde se enfoque en todo momento a la o el intérprete”, expone el artículo.
Minutos después de iniciar a desahogar los puntos del orden del día en sesión permanente, el coordinador del PRD, Jorge Gaviño pidió al presidente de la mesa directiva, José Luis Rodríguez dar lectura al artículo mencionado para exponer que se encontraban violando su propio reglamento.
“Decirles que esto se enmarca en una falta de planeación porque no es posible que se dé de baja a un personal sin tener claro quién lo va a sustituir y que íbamos a caer en un incumplimiento legal”, apuntó.
Rodríguez agregó que el despido de estos trabajadores de base fue un asunto que se derivó de un acuerdo de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), aprobado en diciembre, y suscrito por su partido, por lo que continuó la sesión.
No obstante, fue interrumpido por el coordinador del PRI, Tonatiuh González, quien informó que “para no violar el Reglamento de este Congreso y la Ley, se acordó ahorita dar un apoyo económico a la intérprete para que nos acompañe y no estemos violando la ley”.
El morenista Temítocles Villanueva refirió que no sólo era para respetar la ley sino “de garantizar la accesibilidad, sino de algunas personas que viven con alguna discapacidad”.
Afirman que despido fue decisión unilateral despido
En un comunicado, los trabajadores despedidos del Congreso señalaron que su despido fue de manera unilateral y afirmaron que no fueron contratados de manera irregular, puesto que muchos tenían entre 5 y 22 años de antigüedad.
Asimismo dijeron que sus contrataciones se realizaron a pie de rama, es decir, con sueldos correspondientes a sus niveles y no sobrepasan los 14 mil pesos mensuales.
“Es información falsa, tendenciosa y parcial que trabajadores basificados violaron el escalafón y que sus sueldos van desde los 35 mil a los 55 mil pesos mensuales”, apuntaron.
Revisión de caso por caso
Tras concluir la sesión, el también vicecoordinador de Morena, Rodríguez Díaz de León, aseguró que se revisó “caso por caso” los expedientes de los trabajadores despedidos.
Sobre la interprete de señas, será Oficialía Mayor la que resolverá el caso por un esquema de contratación diferente a la basificación, es decir, podrían recontratar por honorarios.
“No necesariamente (se estaría reintegrando) en el esquema de la plaza que ustedes tienen conocimiento que forma parte de un proceso de basificaciones irregulares, 77 basificaciones irregulares. No es factible mantener ese esquema de contratación, no es posible bajo ninguna circunstancia porque genera una vulneración a los derechos laborales”, apuntó.
EB