Jorge Luis Barbosa Colunga, aspirante a magistrado del Tribunal Colegiado de Circuito de Materia Civil en Guanajuato, negó rotundamente haber conducido en estado de ebriedad y asegura que su detención fue arbitraria e injustificada. Además, aclara que no tiene ninguna relación con el partido político Morena, como se ha insinuado en algunos medios de comunicación.
De acuerdo con el documento proporcionado a MILENIO la nota difundida en diversos medios de comunicación de la entidad se originó a raíz de la detención de Jorge Luis Barbosa Colunga aparentemente en un operativo de alcoholemia en Guanajuato.

La noticia de su detención fue difundida en redes sociales, donde se le identificó como aspirante a magistrado. En respuesta, Barbosa Colunga exige derecho de réplica, argumentando que su detención fue arbitraria y que no se encontraba en estado de ebriedad. Además, niega tener vínculos con el partido Morena, como se insinuó en algunas publicaciones.
El aspirante a magistrado fundamenta su solicitud de réplica en la Ley Reglamentaria del Artículo 6 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que garantiza el derecho a toda persona a aclarar informaciones inexactas o agravantes emitidas en su perjuicio a través de los medios de comunicación.
De acuerdo al documento de lista de aspirantes a candidatos, los cuales están en espera de aprobación, Jorge Luis es uno de los tres candidatos a ocupar la titularidad del decimo sexto circuito en materia civil, junto con Oscar Edmundo Aguayo y Lucero Irais Miranda García.

Mencionar que, las campañas arrancan el 30 de marzo y la elección se llevará a cabo el 1 de junio.
De acuerdo a información disponible en la Plataforma Nacional de Transparencia, Jorge Luis laboró en el primer Tribunal Colegiado en Materia civil, como Oficial Judicial, así como la Procuraduría Estatal de Protección de niñas, niños y adolescentes; finalmente trabajó de manera eventual en el Instituto Electoral del Estado de Guanajuato, como técnico en el pasado proceso electoral.
El caso ha generado polémica y ha puesto en el centro de la discusión pública la transparencia en los procesos de selección de magistrados, así como el comportamiento ético de los aspirantes a cargos judiciales.