Las negociaciones sobre el arancel estadunidense del 50 por ciento a las importaciones de acero, aluminio y cobre siguen en curso, por lo que el presidente de la Cámara de la Industria de Transformación de Nuevo León (Caintra), Máximo Vedoya, pidió al embajador de Estados Unidos en México, Ronald Johnson, que se otorgue al país un trato preferencial en el sector.
“Siguen las negociaciones, todavía no hemos llegado a ninguna conclusión, como sabrán, todos los países, no solo nuestra nación, están con este arancel del 50 por ciento (…) México debería tener un trato diferencial porque es el único que tiene con Estados Unidos un superávit en el acero”, expresó tras asistir a la reunión mensual del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Mencionó que al embajador Ronald Johnson le interesó este tema, por lo que se reunirá posteriormente con el líder de Caintra para profundizar en la problemática.
“Los estadunidenses y las siderurgias exportan más del doble que nosotros, los mexicanos, exportábamos a Estados Unidos, esto quiere decir que el mercado mexicano tiene el mismo valor que el estadunidense y que compartimos la misma visión ya que combatimos el comercio desleal que son cosas que les importan a ellos”, sostuvo.
El presidente de Caintra reiteró que México es una nación seria y que comparte los mismos valores que Estados Unidos.
Sin embargo, puntualizó que la decisión dependerá del país vecino del norte y del gobierno mexicano, ya que la problemática de este sector debe estar dentro de sus prioridades.
En cuanto a la reunión, precisó que el embajador contó sobre cuáles son sus objetivos en el territorio nacional y que además reconoció la relación entre ambos países, la cual deberá ir creciendo.
El presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), Alejandro Malagón, comentó que se debe trabajar bastante en relación con la negociación sobre el arancel del 50 por ciento a este sector por las implicaciones que se tienen.
“En extracción no hay problema, en metal no hay problema, pero en el concentrado sí, porque el concentrado es el que se convierte para hacer los cables y todo se fabrica en México, aunque algunos de los concentrados que vienen son producidos en Estados Unidos y se vienen para acá para producir el cable”, apuntó.
Comentó que habrá que analizar a detalle este tema, a fin de que se pueda encontrar una solución que represente un ganar-ganar.
MRA