El huracán Douglas, en el Océano Pacífico, azotaría Hawái en las próximas horas, aseguró el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC). En tanto, los habitantes del archipiélago se preparan para peligrosos oleajes, fuertes vientos y súbitas inundaciones, en momentos en que la población enfrenta un aumento en los contagios por coronavirus.
Hurricane #Douglas Advisory 23: Hurricane Douglas Continues to Move West-Northwest Toward Hawaii. Tropical Storm Warning Issued For Kauai County. https://t.co/mbw53QNBXE
— NHC Eastern Pacific (@NHC_Pacific) July 26, 2020
El NHC dijo en un boletín que pronostica que Douglas pase sobre las principales islas hawaianas en la noche del sábado o la mañana del domingo. A pesar de ello, los residentes de Maui se mostraban típicamente tranquilos frente a la tormenta.
“Douglas mantiene una tendencia al debilitamiento gradual y lenta, que en sí es una buena noticia, pero la mala noticia es que este huracán va a pasar muy cerca de las islas aún si va perdiendo fuerza”, dijo Robert Ballard, director de ciencia y operaciones en el Centro de Huracanes del Pacífico Central. “Y esperamos repercusiones importantes en su punto de mayor aproximación o si toca tierra a su paso”.
Luke Meyers, administrador de la Agencia para el Manejo de Emergencias de Hawai, exhortó a la gente a prepararse conociendo los peligros de la zona donde viven. “Sabemos que habrá mucha agua, algunas partes van a reventar y derrumbarse”, declaró.
Hawái tiene una fracción de los turistas que normalmente tendría en esta época del año debido a la pandemia del coronavirus, algo que ha hecho las cosas más sencillas para los responsables de emergencias.
"Estamos guardando las sillas del jardín y poniendo rocas grandes en algunos materiales de tejado que acabamos de comprar", dijo Chuck Boerner, un agricultor de 74 años de Kipahulu, al este de Maui.
"Si hay algo positivo en esta situación es que hay menos visitantes que contar, menos personas de las que preocuparse", dijo Chris Sugidono, un funcionario del condado de Maui.
Los refugios están implementando medidas para garantizar el distanciamiento social, pero las personas deberían refugiarse idealmente en sus hogares, a menos que estén en una zona de inundación, dijo.
Alrededor de la mitad de las personas en los refugios son visitantes a quienes se les pospusieron o cancelaron sus vuelos durante huracanes previos, dijo Sugidono. Aquellos que todavía están en cuarentena en sus hoteles deben quedarse allí a menos que el hotel se vea amenazado.
El gobernador de Hawai, David Ige, indicó que las autoridades anticipan lluvia, viento y marejadas en las costas orientales.
“Sabemos que se está debilitando a medida que se acerca, pero todavía tendrá un impacto importante en cada isla”, afirmó en una conferencia de prensa.
El alcalde de Honolulu, Kirk Caldwell, dijo en la misma conferencia que 13 albergues serán abiertos el domingo a las 9:00 de la mañana en Oahu, antes de que el huracán llegue a la isla entre el mediodía y la tarde noche. La tormenta se ubicaba el sábado a 580 kilómetros al sureste de Honolulu.
El presidente Donald Trump emitió el sábado una declaración de emergencia debido al huracán a fin de disponer que asistencia federal complemente las acciones estatales y locales.
dmr
