La Universidad Autónoma de Puebla (UAP) se colocó en el quinto lugar nacional por solicitudes de patentes de diferentes proyectos desarrollados por investigadores y presentados ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) en el periodo 2013-2018.
Estudiantes, académicos e investigadores de la máxima casa de estudios del estado presentaron un total de 164 solicitudes de patentes de las mil 171 peticiones registradas en el país.
Los equipos de investigación presentaron las solicitudes en rubros de propiedad intelectual, invenciones, servicios de información tecnológica, redacción de patentes, signos distintivos y esquema de operación de esos centros.
De acuerdo con el reporte del IMPI, del total de solicitudes de patentes, 278 fueron solicitadas por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); 222 por el Instituto Politécnico Nacional (IPN); 167 por el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav) y 140 por la Universidad Autónoma de Nuevo León.
La UAP apareció en quinto lugar con 164; le sigue con 89, el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), 66 de la Universidad de Guanajuato y 45 de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
Ante las solicitudes de patentes, el IMPI, en coordinación con la Secretaría de Educación Pública (SEP) federal planean abrir nuevos Centros de Patentamiento (CePats) en las instituciones de educación superior como la UAP.
El proyecto permitirá acortar la brecha entre el proceso de incubación y el proceso comercial de una idea de innovación y emprendimiento generada en las instituciones. La instalación de los CePats forman parte del esquema nacional para proteger y fomentar el desarrollo de nuevas creaciones en beneficio de la comunidad.
De acuerdo con el IMPI, la cultura de protección a la propiedad intelectual es un área de oportunidad en el país, situación que se traduce en bajas cifras de registros de patentes en comparación con otros países.
En México, 92 por ciento de las patentes son extranjeros que protegen sus inventos porque son una garantía de exclusividad y de explotación para ellos.
Aunque el proceso para obtener una patente es largo porque se requieren realizar diferentes investigaciones para verificar que la propuesta es nueva y no existe en ninguna otra parte del mundo, el IMPI resaltó la importancia de proteger la propiedad en un proceso que puede durar de tres a cuatro años.
ARP